“Porque conocéis la misericordia de nuestro Señor Jesucristo, que por vosotros se hizo pobre siendo rico, para que vosotros con su pobreza os enriquecierais” (2 Cor 8, 9).
Mis Hermanas y Hermanos en Cristo:
Nuestro Santo Padre, el Papa Francisco, comienza su carta apostólica con motivo de la Sexta Jornada Mundial de los Pobres con las palabras de San Pablo a los Corintios. “Jesucristo… por nosotros se hizo pobre”. San Pablo habló a los primeros cristianos como nos habla a través de Jesús para siempre recordarnos que, por nuestra fe católica, estamos obligados a vivir en solidaridad con todo el pueblo de Dios. Nuestro Santo Padre nos pide que “reflexionemos sobre las muchas formas de pobreza que nos rodean”.
Es apropiado que recemos esta Escritura mientras realizamos la Colecta Anual de Caridades Católicas de la Florida Central el fin de semana del 19-20 de noviembre. Esta importante colecta es nuestra oración a Dios en acción de gracias por todo lo que se nos da mientras “mantenemos nuestra mirada fija en Jesús” y nos ofrecemos a Aquel que se hizo pobre para que nosotros fuésemos enriquecidos.
La comunidad cristiana primitiva sufrió grandes dificultades debido a la escasez de alimentos y el apóstol Pablo se dispuso a organizar una gran colecta para ayudar a los necesitados. Dos mil años después, durante la celebración de la Sagrada Eucaristía, nuestro Santo Padre nos recuerda que “nosotros hacemos lo mismo, reuniendo nuestras ofrendas para que la comunidad pueda proveer a las necesidades de los pobres”. Unimos nuestros esfuerzos en solidaridad con nuestros antepasados y aquellos a quienes ahora servimos a través, con y en el amor de Jesús.
En la actualidad, nuestros vecinos de Florida Central continúan experimentando muchas dificultades: encontrar viviendas asequibles, asistencia financiera, apoyo alimentario y atención médica. Vienen a los centros de extensión de Caridades Católicas de la Florida Central en busca de consuelo y, con suerte, un respiro a través de nuestros recursos.
Muchos de nuestros vecinos dentro de la Diócesis de Orlando también se vieron afectados por el huracán Ian y sus necesidades continuarán mucho después de que los equipos de respuesta a emergencias completen sus visitas. El personal y los voluntarios de Caridades Católicas de Florida Central trabajan incansablemente para ofrecer sustento a estos hombres, mujeres y familias. Su apoyo a nuestros ministerios a través de la Colecta Anual nos ayuda a alabar a Dios sirviendo como Cristo a cada uno.
El tesoro de Jesús es Su amor ofrecido como el “Pan de Vida” (Jn 6:35) para que nunca tengamos hambre. Compartamos lo que Él da para que todos puedan recibir. Da lo que puedas para que el tesoro del Cielo reine en nuestro diario vivir. Rezo con gratitud por su generosidad.